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20 de Enero de 2023 Actualidad

¿Cómo surgieron los relojes militares?

Cómo influyó la milicia en la relojería actual

La relojería moderna no sería lo que es hoy en día, si no hubiera sido por el importante aporte que hizo la ingeniería militar en términos de durabilidad y precisión a principios del siglo XX. Un siglo antes, los relojes de bolsillo seguían siendo no solo piezas clásicas de alto valor que permitían medir con exactitud el paso del tiempo, también eran el accesorio por excelencia que iba acorde a cualquier tipo de traje, y en general,  al estilo de vida sobrio y con clase que llevaban los hombres en las principales ciudades del mundo por aquella época. Luego de la Primera y Segunda Guerra Mundial, comenzó a ser mejor visto el uso de relojes de pulsera que habían sido usados en estos conflictos bélicos debido a que eran más prácticos y sencillos para las labores contemporáneas que exigían prontitud, comodidad y precisión en piezas que pudieran estar al alcance de la mano. ¿Quieres conocer más detalles sobre la historia del reloj militar? ¡No te pierdas esta increíble nota que traemos para ti en Oficina del tiempo!

 

Historia de los relojes militares

 

Los relojes militares clásicos de bolsillo fueron empleados durante el siglo XVIII Y XIX dentro de los principales contextos de guerra de aquellos años debido a que era indispensable mantener un control del tiempo tanto en el campo de batalla, como en los submarinos y aviones bombarderos que eran empleados por la marina y la fuerza aérea respectivamente, pero para muchos soldados estos implementos eran poco prácticos en los espacios de acción debido a que no era fácil manejarlos al interior de una aeronave de combate ni mucho menos, en medio de un enfrentamiento directo. Debido a esto, se estima que para 1880, la casa relojera Girard-Perregaux atendió el llamado de un oficial de la Marina Imperial Alemana, quien tras quejarse con sus superiores de la ineficiencia de los relojes de bolsillo para cronometrar un bombardeo, demostró que era mucho más práctico amarrarse el reloj a la muñeca para contabilizar el tiempo. De este modo, para final de siglo Girard-Perregaux comenzó a fabricar las primeras piezas de relojería en pulsera que eran enviadas a Berlín como un pedido especial para esta jurisdicción militar. 

 

Sucesos que marcaron los relojes militares

 

Sin duda alguna, tanto la Primera como la Segunda Guerra Mundial influyeron notoriamente en la creación de los mejores relojes para militares debido a que se convirtieron en una herramienta indispensable para toda clase de batallas. En la Primera Guerra Mundial comenzaron a ser conocidos como trench watches” o “wristlets” y no tenían una característica especial que los diferenciara de otra clase de relojes más convencionales. La carátula era blanca, lo suficientemente amplia, con grandes números negros luminiscentes que facilitaban la lectura. La mayoría de las correas eran fabricadas con piel, y como herencia de los relojes de bolsillo, algunos modelos traían una tapa delantera que brindaba una mayor protección al mecanismo interno, pero con los años se hizo más popular el uso de rejillas que facilitaba visualizar la hora sin necesidad de abrirlos.

 

Para la Segunda Guerra Mundial ya era posible obtener piezas más sofisticadas con avances notorios en términos de hermetismo y resistencia a golpes, magnetismos y cambios abruptos de temperatura que aún se mantienen como características esenciales dentro de cualquier reloj militar. Las rigurosas especificaciones militares crearon un amplio mercado de piezas que eran encargadas a los principales expertos en relojes. Los maestros relojeros suizos fueron los encargados de dotar a los principales países en guerra de un sin número de modelos tácticos, que desde aquella época comenzaron a distinguirse por las emblemáticas marcas WWW (Watch, Wrist, Waterproof) que son grabadas al reverso de las cajas de titanio de estas piezas de la más alta ingeniería.  

 

La esencia de los relojes militares

 

Para que un reloj sea considerado como una pieza militar, debe contar con una serie de características entre las que destacan:

 

- Resistencia: a diferencia de otro tipo de modelos, los relojes militares están específicamente diseñados para adaptarse a los contextos más riesgosos por lo que son altamente resistentes tanto a condiciones atmosféricas poco favorables como a golpes y rasguños de todo tipo. Aunque actualmente estas piezas pueden estar fabricadas de diferentes materiales altamente resistentes según las especificaciones del modelo, los relojes más clásicos son fabricados con metales niquelados derivados de plata esterlina con acabados mate que evitan brillos innecesarios que podrían llamar la atención en un escenario riesgoso.  

 

- Precisión: como ya es usual en piezas de alta gama, los relojes militares son fabricados con parámetros milimétricos que garantizan la mayor precisión en todo tipo de contextos. 

 

- Legibilidad: tanto para los soldados como para los demás miembros de un ejército militar, es importante la legibilidad dentro de los espacios tácticos debido a que la mayoría de las veces estos implementos deben ser empleados en ambientes poco luminosos o de bastante actividad física. Con pocos elementos decorativos y una mayor claridad en los diferentes detalles del reloj, estas piezas apuntan a la practicidad en cada uno de los diferentes modelos que puedes encontrar en las principales casas relojeras de todo el mundo. 


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